La Comunicación corporativa (II Parte)

Me gusta comparar el funcionamiento del mundo empresarial con el de las personas. Si sigues cualquier tema económico, además, te encuentras con unos titulares casi del corazón: "Cuatro y La Sexta ponen números a su noviazgo"; Un nuevo acercamiento entre Microsoft y Yahoo!, etc.

Aún partiendo de la base de que el primero (el mundo empresarial) resulta aún más complejo, no sólo por las dimensiones que puede llegar a tener, sino porque uno más uno no son dos, sino otro diferente, a veces cualquier situación empresarial se puede analizar desde el prisma humano (de las personas). El porqué es muy obvio: las empresas están creadas por y para las personas y sobreviven gracias a ellas.

En el post anterior relacionaba la comunicación corporativa desde un punto de vista algo limitado, porque esta tarea va más allá que la mera relación con la sala de prensa. Para entender esta amplitud del término lo vamos a relacionar bajo este prisma humano con el que comenzábamos: igual que cualquier persona (como "ser social" que es) necesita comunicarse con los demás porque necesita de ellos y darse a ellos, las empresas necesitan comunicarse con la sociedad en la que existe y con quien comparte la actividad y un espacio de diálogo.

Quizá sea este el principal motivo por el cual la mejor fórmula para combatir la crisis sean los directores de comunicación de las empresas, según la última encuesta anual ‘The Rising CCO' (elaborado por Weber Shandwick entre otros y publicada hoy en PR Noticias), que afirma que "en tiempos de inestabilidad económica, los Directores de Comunicación ganan peso dentro de la dirección de las empresas".

Al final, se trata de un departamento (el de comunicación) que debe tener presencia en toda la organización, empezando desde la alta dirección. Y no debería ser dejado al margen de la actividad de la empresa, sobre todo en estos tiempos que corren y con las herramientas socializadoras en expansión, gracias a Internet.